jueves, 31 de julio de 2008

Desinstitucionalización

La construcción personal sobre el significado de desinstitucionalización, puede comenzar por considerar la etimología de la palabra; el prefijo “des” significa no, y la palabra institución, derivado del origen etimológico de institutio, que significa “educación”. Entonces el cuestionamiento surge, ¿Qué debemos desaprender (o no aprender) según lo que nos propone la etimología de la palabra desinstitucionalización?, y el intento de respuesta comienza a asomarse.

El prefijo “des” no significa negar la institución, negar aquello que construye subjetividad, significa re-construir y cuestionar ciertas implicaciones, esquemas y parámetros derivados de lo institucional, que se consideran como valores absolutos. De esta manera, considero que la desinstitucionalización no significa negar la dimensión institucional del sujeto, sino que implica re-conocerla o reconstruirla.

Las diversas instituciones, como los hospitales, las cárceles, los manicomios, etc., se conciben por la sociedad como lugares al servicio del orden y la defensa del hombre, pero, como se cuestiona Basaglia, al servicio de qué hombre; del hombre que debe ser o del hombre que es. Emergen entonces los parámetros institucionales que deben desaprenderse. La función de la institución se presenta como una simple contención de las desviaciones, y por tanto al servicio del control y defensa de la “norma”, donde se ejecutan los crímenes de las necesidades del hombre real; es decir, particularmente en el asilo manicomial se ejecuta el crimen de la necesidad de la cura, originándose un efecto paradójico, la institución enferma. Sin desaprender ciertos supuestos, la violencia institucional continúa concretando los crímenes de las necesidades del hombre real al servicio del orden, excluyendo lo diferente, lo desviado, exclusión que produce un estigma. El nuevo aprendizaje invita a ver lo diferente como producto de las características del contexto histórico-social que transita, ver, por ejemplo, a la persona con sufrimiento mental, no como algo escindido y arbitrario, sino como producto del funcionamiento de la sociedad en la que surge.

Considero entonces que la desinstitucionalización, implica un cambio progresivo que se dirija a un tipo de institución distinto al violento, segregante y totalizador, que considere los distintos aspectos de la persona, y no se ejecute una reducción a la categoría, en el caso de una institución manicomial, de “todo enfermo”, eliminando, de esta forma, la historicidad y despojando tanto de sus rasgos distintivos y de sus derechos a los individuos.

Estas consideraciones se reducen a la desinstitucionalización como concepto, pero el rasgo activo y vivo del mismo, nos traslada a las acciones necesarias para ejecutar efectivamente este “nuevo aprendizaje”, poner en acción el concepto implica una amplia participación de los actores sociales, porque las instituciones son una construcción artificial, y como tal, son un producto histórico-social. Desinstitucionalizar no significa negar las instituciones, porque implicaría, en el caso de las enfermedades mentales, negar la enfermedad así “como los manicomios niegan la locura encerrándola” (9), implica desaprender lo institucional segregante y totalizador, y crear nuevas alternativas, maneras superadoras del castigo y vigilancia, que se dirijan al respeto y restitución de la integridad del individuo.

domingo, 27 de abril de 2008

Exclusión

Los lugares no nos pertenecen, queremos entrar pero los requisitos cambian constantemente, para la satisfacción de quién… es la pregunta. Los cuestionamientos nos dirigen a pensar por qué, cuál, dónde, lo cierto que siempre envejecemos en búsqueda de respuesta, queremos satisfacer nuestra curiosidad porque queremos pertenecer para no parecer un resto. Lo cierto que los restante es lo más atractivo y único del conjunto, ya que dentro de la masa la diferencia no existe, las pasiones se acrecientan y la intelectualidad decrece, como decía Sigmund, no se diferencia la diferencia de la virtud, sino la respuesta al conjunto, se conciben las reglas que nos uniforman, ensimismarse es el efecto continuo de la masa. Indiferenciación es el precio de la pertenencia al conjunto limitado de personas que se reconocen como miembros de un sistema, de una empresa, de institución, la violencia a ser excluidos nos lleva a no diferenciarnos. Construir por fuera, como una audiencia externa de lo que ocurre entre las grandes organizaciones, ser constructores de propias ideas, poder representar el deseo propio en un proyecto, poder concretar lo anhelado. La exclusión de un sistema cerrado (aunque dicen que son abiertos y en constante interacción) pero lo hermético existe, la exclusión de un “lugar” cerrado nos provee la posibilidad de ser sus observadores objetivos, ahora la integración es con uno mismo y con lo provechoso de nuestras potencialidades y singularidades que estando dentro de la masa, de la empresa, del conjunto, no podíamos percibir. Construir singularidades, bah tu singularidad, mi singularidad, la singularidad de él, de ella, etc.

jueves, 27 de marzo de 2008

Lucidez

Las modificaciones crean preguntas, incógnitas, todo conduce a lo incierto, y las letras de una canción pueden conducir a relajarse mentalmente y dejarse llevar, el entendimiento concluye aparentemente en la lucidez, pero lo lúcido por momentos también oscurece un punto de vista; el conocer e investigar, el aprender y cambiar, produce avances que originan más experiencias y más sabiduría, pero al mismo tiempo más desconocimiento, pero el conocer no es poder, siempre, es un continuo movimiento y traslado de la oscuridad a la luz, y que en ese transcurrir, la ignorancia se presenta como un estado cómodo para detenerse, pero incómodo para permanecer.

martes, 11 de marzo de 2008

Indefension

Los medios para solventar ciertos deseos son insufucuentes, proque el estado de indefension del infante acompaña hasta lo mas lejano del tiempo. Los logros del adulto son reflejos de los suños infantiles, de los deseos del infante, el autoconcepto, la imagen corporal, la autoestima constructos que dejan de serlo al estar presentes en la cotidianeidad de la vida adulta, constructos que se construyen inicialmente en un universo primario de paz y armonia, elcontraste de este universo con el secudario produce conflicto, porque el conflicto existe cuando hay contradicion de discursos, de ideas, en estos conflictos el estado de indefension despierta y comienza la busqueda de medios, sean artificios o naturales, de lugares, de proteccion, de techos donde refugiarse de los pesares. El deseo continua empujando a seguir deseando, el deseo hace insatifescho hasta el ser humano mas proximo a su completud, el deseo construye continuamente, es necesidad de resiginificar el estado de indefension del infante.

lunes, 3 de marzo de 2008

Insomnio

Las melodías cuando no estan selen ser mas fuertes y ensordecedoras, por la noche el silencio les da espacio protagonico, de unos sonidos mas puros y inspiradores de melodías no somniferas, el dormir, el cesar de las represiones se torna imposible cuando el silencio inspira a las melodías a escucharse pro si mismas, se pueden crear varias melodías pero la conciencia quiere descansar y dejar el inconciente que trabaje atemporalmente y disparatadamente, pero cuesta despojarse de las tensiones diurnas, cuesta tiempo, sin querer se va diluyendo en lagrimas de bostezos que lloran por querer conciliar ese momento disparatado al que invita soñar, pero el silencio esta obstinado a irrumpir cualquier producto onirico. (27/11/2007)

Nomenclatura

¿La nomenclatura es una ciencia? No diría una ciencia veramente (jaja), lo cierto que es producto del ingenio o de la historia, es una categoría artificial que conduce a nombrar las cosas ya nombradas, o nunca nombradas. Es importante el nombre porque deja una marca, una huella y hasta permite ponerle afecto a esa marca, a esa huella, por eso en el nombrar es tan importante el afecto, la emoción, el matiz, es decir el nombre de una nota musical, el Do por ejemplo, no garantiza que siempre se transmita de la misma forma al ser interpretada, es el interprete, quien le agregara matiz a esa nota y le dará emoción, así un cerebro escindido o un portador de un cerebro escindido puede reconocer el estimulo pero no darle afecto, como una formación psíquica de un típico neurótico obsesivo de Freud, donde la representación y el afecto están separados y ese afecto se apega a otra representación desencadenando un síntoma sobre el cual se apoyara la necesidad de terapia coloquial para llegar a ver si la escisión se termina. Entonces la nomenclatura en realidad es una herramienta, es el afecto la que le da forma y sentido a la utilización de esa nomenclatura, si bien la instrucción es una herramienta que pueda tender hacia utilizar los nombres o categorizar mas correctamente, pero sólo la emoción, el afecto puede transmitir el verdadero sentido de esa nomenclatura. (19/11/2007)

La repetición

Momentos de no entendimiento sobre algo entendido en su momento; y así es la repetición, vuelve y vuelve otra vez, sino no hablaríamos de ella, pero esa aparente inmovilidad que transmite la repetición encierra un movimiento, y ese movimiento consiste en otro sentido, diferente a aquel que tenía cuando se expreso anteriormente. Esto debe ser por el significante? Claro porque este encierra movimiento, encierra esa movilidad a la que conlleva repetición, se podría ejemplificar con la repitencia del colegio, ¿es en realidad repitencia?, o la necesidad de resignificar conocimientos y hasta momentos no comprendidos por el sujeto, bueno pero esta afirmación reduce al hecho en una transpolación de conocimientos, y esa no era le idea de este escrito, en realidad este escrito quería fundamentar la existencia de la repetición, y lo necesario de repetir en la repetición, la movilidad del significante lo comprueba, por suerte que entendimos la arbitrariedad de la unión significado-significante, sino creeríamos que todo aquello que connota un significado tiene uno solo, y seria muy chato ver las cosas con un solo punto de vista, y creer que ese es el verdadero, osea tampoco hay que tender a una anarquía lingüística, si, la verdad debe existir pero como construcción, ir constantemente en busca de la verdad para llegar a la personal, y la repetición puede devenir en verdad; la de la realidad psíquica, como la verdad de las histéricas de Freud, no por psíquica menos real. El intento de este escrito fue tender hacia el fundamento de la repetición no muy extensa porque tampoco me alcanza mis mecanismos intelectualoides para llegar a ella, la repetición de la imagen, la repetición de las vivencias, un dejavu, la repetición de las lectura de un libro, del compás de una partitura encierra movilidad que intenta descubrir su sentido, y ahí entra el siginificante en escena, por eso también el síntoma del obsesivo, quien repite sus rituales para la preservación o evitación de la perdida de su objeto mas preciado, entrama su sentido (es obvio) pero bueno la repetición nos conduce a querer conocernos, conocer, a entender y cerrar aquellos significantes que parecen no querer acoplarse a un solo significado, sino no existiría la repetición. (13/11/07)